Camino Francés desde Burgos a León
El Camino Francés desde Burgos a León es un puente entre dos de las principales ciudades de la ruta jacobea. Las catedrales de Burgos y León son hitos de la arquitectura religiosa española.
Nuestro punto de partida, Burgos
La Catedral de Santa María de Burgos, declarada Patrimonio de la Humanidad, es una de las obras maestras del gótico español. Al igual que la Catedral de Santiago de Compostela se construyó sobre un edificio románico anterior.
Burgos fue también la capital medieval del Reino de Castilla y León durante cinco siglos, lo que nos da una idea de su importancia histórica. Eso sí, el primer día de nuestro viaje, podemos aprovechar para brindar con un buen vino de la Denominación de Origen Ribera del Duero.
Nuestro recorrido del Camino Francés desde Burgos a León
En general, el Camino Francés de Burgos a León es una ruta bastante cómoda debido a sus pocos desniveles. Solo encontraremos un par de desniveles, aunque hay que tener en cuenta las dificultades climáticas. Estamos en plena Meseta Castellana, con bajas temperaturas en invierno y sobre todo mucho calor en verano, por lo que es recomendable prepararse para ello.
Durante la quinta etapa del recorrido tendremos la oportunidad de visitar el monumento al posadero en Villalcázar de Sirga, quien fue una figura muy importante en la restauración del Camino de Santiago y la gastronomía jacobea. En la sexta etapa también podemos recorrer parte de la antigua Vía Aquitania, la calzada romana que unía Astorga con Burdeos.
León, ciudad de tradición jacobea
Una vez en León, nuestra última parada en esta ruta del Camino Francés desde Burgos a León es una visita a la catedral conocida como “Pulchra Leonina”, un magnífico edificio gótico. Tampoco debemos perder la oportunidad de visitar la Casa Botines de Gaudí y el Hospital San Marcos, que fue casa de peregrinos. Más que recomendable es un paseo por el casco histórico y una parada en el Barrio del Húmedo. Después de once días de caminata, merecemos celebrar el final del Camino de Santiago con un buen homenaje a la gastronomía de la región.
La llegada a León no es el final, sino una pausa en el Camino que debemos continuar hasta llegar a Santiago de Compostela.
¡BUEN CAMINO!