Incluido
Viaje en barco
Degustación de mejillones y vino
50 €*
1 día
Viaje en barco
Degustación de mejillones y vino
Entre Baiona y Fisterra se encuentra el paraíso en la tierra, una extensión de costa recortada por la singular forma en la que el Océano Atlántico se adentra en Galicia: las Rías Baixas. Playas de arena fina y aguas cristalinas, islas verdes en medio del gran azul, bosques que se asoman al mar, pueblos que aúnan la tradición de las villas pesqueras con el hechizo de bulliciosos lugares de veraneo. Y, como no, los pescados, los mariscos y los vinos con los que esta conjunción de tierra fértil, aguas calmas y clima privilegiado han bendecido a esta zona.
Centro de este geodestino son las Rías de Arousa y Pontevedra, dos rías hermanas que acogen los más ricos tesoros del mar.
Una de las panorámicas más características de las Rías Baixas, tanto a vista de pájaro como desde tierra, son las enormes lenguas de agua azul plagadas de bateas. Estas plataformas destinadas al cultivo de bivalvos son propias de la zona, una forma de cría que proporciona los más apreciados frutos del mar, y de una calidad indiscutible.
Entre estas imponentes estructuras navegaremos a lo largo de la Ría de Arousa, para verlas desde cerca, pudiendo disfrutar de una travesía inolvidable con degustación de mejillones y vino de la zona. También para cambiar nuestro punto de vista y ver la tierra que nos rodea, desde dentro de la propia Ría.
Si hay una zona en la que se acentúa el especialmente agradable microclima de las Rías Baixas, esa es la Península de O Grove, a la que muchos llaman el Caribe Gallego. Casi una isla unida al continente por el istmo de O Bao, una marisma que constituye uno de los principales humedales de Galicia.
Y si hay algo que acompaña mejor a sus especiales características climatológicas y paisajísticas para que esta sea también una de las zonas que más veraneantes congrega, es su magnífica gastronomía, encabezada por el marisco, del que se dice que O Grove es capital. Al menos, acoge la fiesta de referencia de exaltación del marisco, declarada Fiesta de Interés Turístico Nacional.
El enorme desarrollo en las últimas décadas de toda esta lengua que delimita las Rías de Arousa y Pontevedra ha sido decisivo para su consolidación como referencia del turismo de playa y ocio nocturno, pero su historia está ya íntimamente ligada desde mucho antes a la de los viajeros que buscaban el descanso en sus balnearios. Las aguas termales de la Isla de La Toja y su Casino todavía conservan el sabor de aquellas vacaciones de días de relax y veladas suntuosas.
Aunque el nombre de la Denominación de Origen propia de esta zona es Rías Baixas, la uva de tipo Albariño destaca su nomenclatura sobre la D.O. oficial. Albariño, pescados y mariscos van de la mano, porque en su espíritu más profundo, todos ellos son hijos del mar y de este microcosmos tan particular que son las Rías Baixas. Y, si hay, además, un lugar en el que el vino es más Albariño que en ningún otro sitio, ese es Cambados, una localidad señorial con un ambiente que sabe a la Galicia atlántica más auténtica.
Toda la costa que bordea las Rías Baixas está plagada de pueblos y playas en una sucesión de lugares encantadores que combinan naturaleza, modernidad y tradición. Hay pueblos en los que no importa el tamaño, sino que son capaces de concentrar en una escasa extensión algunos de los elementos arquitectónicos más tradicionales de Galicia. La piedra, trabajada por el hombre en las formas más características de la Galicia interior, se asoma directamente al mar, configurando casi un museo antropológico al aire libre. Hórreos y cruceiros que no solo nos cautivarán por su belleza, sino por todo el significado que contienen.
2 Personas | 85 €/pax |
3 Personas | 80 €/pax |
4 Personas | 70 €/pax |
5 Personas | 60 €/pax |
6 Personas | 55 €/pax |
7-8 Personas | 50 €/pax |
Suplemento partiendo desde Silleda/Lalín | 5 €/pax |